Y a propósito de este post, quiero compartirles algunas ilustraciones de Vladdo, caricaturista y periodista colombiano, que a través de su personaje Aleida, creado en 1997, hace una ácida e inteligente interpretación de la conducta femenina, pero en la que también critica de manera férrea al género masculino y acude al cinismo para burlarse de sí misma.
Este tema lo traigo a colación, porque recientemente estuve reunida con algunas amigas de todas las edades y el común denominador, era la soltería de ellas. En serio, la única casada era yo.
Al parecer, y según comentaron, no hay hombre que se les mida.
Me sorprendió porque había muchachas desde los 35 hasta los 60, solteras, separadas y una viuda y ninguna tenía novio, ni pretendiente. Amigos sí, y por montones.
Me puse a mirarlas y encontré que todas eras muy parecidas: profesionales, con maestrías, con experiencia, excelentes ejecutivas, lideresas, informadas, opinadoras, habladoras, festivas, gozonas, hermosas, bien vestidas, independientes, con su propio dinero, de muy buen vivir, inteligentes, llenas de argumentos sobre diferentes temas y se ven felices. Es más, les pregunté si lo eran y todas dijeron que sí; pero que sería rico contar con un buen compañero.
Y descubrí por qué no tenían novio o buen compañero, justamente por ser todo lo anteriormente descrito: por inteligentes, independientes, lideresas, bonitas y exigentes.
Al preguntarles por qué no tenían pretendientes, se rieron y su respuesta fue muy parecida, la cual resumo: «con el tiempo y con la edad, con la independencia y la experiencia, ya no estamos para ser cortejadas por cualquiera, nos volvimos más exigentes porque, en esto, la vida nos cogió ventaja». Es cierto, ya no aceptan en sus vidas a cualquier hombre que se les acerque, mínimo deben tener más o menos su mismo perfil, hombres independientes, seguros de sí mismos, con su vida económica resuelta, alegres, en fin, encontrar un buen compañero, para ellas, no es nada fácil. Es cierto, en su mayoría los hombres, parece, le corren leguas a este tipo de mujeres.
Algunos porque las ven como competencia fuerte y decidida; otros, porque es más fácil una mujer modosita que estas con agallas; los demás piensan que son mujeres difíciles y no se quieren complicar; otros más allá, las quieren sin ideas y que se dejen manejar; y, a los demás, seguro les causa miedo, aunque se mueran de ganas.
Y tienen razón todos, no es fácil conquistar y acercarse a una mujer de hoy y con estos dones.
Está claro que, para llegar a ellas, primero hay que admirarlas y luego enamorarse.
Como les contaba, algunas de ellas eras separadas y claro, su matrimonio falló, porque fueron demasiado grandes para quienes estuvieron a su lado y no aguantaron la presión.
No es fácil convivir con quien te iguala y exige como igual. Y no es feminismo, es simplemente ver la vida como un compromiso de dos, con deberes y derechos de los dos y en donde la sumisión, y eso de estar en la alegría y en el dolor en la pobreza y en la riqueza, en la salud y en la enfermedad, es también de dos.
No es fácil convivir con una persona que, por su independencia económica, le importa un comino, tomar decisiones que otrora, habría que consultar. Aquí las cosas se reparten en partes iguales y lo mío es tuyo, pero lo tuyo también es mío.
No es fácil, casarse con una mujer que piensa que el matrimonio no solo es para tener hijos, y, peor aún, tener ellas que responder por su crianza como si fueran solo de ellas.
No es fácil tener al lado una mujer que trabaja tanto como tú y que los hijos, merecen tener papá y mamá con calidad de tiempo, no mucho, pero sí del bueno y el resto, bien acompañados con nanas también estudiadas, vigiladas por cámaras todo el tiempo y siempre pendientes de sus hijos, pero no solo ellas, los señores también.
Tampoco es fácil casarse con una mujer que tiene claro que no quiere tener hijos porque sus sueños no son de madre, sino otros muy diferentes.
Pero en este escrito parece que no les estoy ayudando a mis amigas, pero la verdad es que, aunque se ve difícil, no lo es tanto.
Estas mujeres así de como la describo, están llenas de amor, son comprensivas, les encanta estar acompañadas y bien acompañadas. La experiencia y la madurez, les da no solo conocimiento, sino inteligencia para manejar bien las relaciones.
Son íntegras, pero no sumisas, amorosas, pero no bobas, delicadas, pero fuertes con sus convicciones, exigentes, pero humildes para reconocer cuando se equivocan y están llenas de amor y de ganas de tener una buena pareja, de esos que sepan gozarse la vida, viajar, bailar, leer, cocinar y eso sí, que las sepan admirar y amar.
Les digo señores que no les corran, por el contrario, ustedes con su inteligencia, pueden llevarse un gran partido, inimaginable y quizás inalcanzable en otro momento, pero si se arriesgan, se ganaron la lotería.
Quien las ve tan experimentadas, tan jefes, tan ejecutivas, tan de altos cargos, tan famosas, en el fondo son todo eso y más, pero tienen un corazón disponible para amar a quien se las sepa ganar. Son amorosas y muy comprensivas.
Si hay hombres que tienen el perrenque para medírsele a una mujer con condiciones diferentes y con dones especiales, están ganados. Sabrán que encontraron lo que estaban buscando, sabrán que tendrán compañía para siempre, sabrán que tendrán amor para rato, conocerán que la experiencia no solo era para trabajar, se admirarán, de lo que son capaces las mujeres capaces y morirán de amor al lado de una verdadera mujer.
Y es que ellas celebran y abrazan la vida, se sienten renacer a cada rato, pero ya sin necesidad de corazas, sino mostrando su autenticidad en todo su resplandor.
Como siempre excelentes comentarios. Felicidades Vicky 👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼
Mujeres maravillosas las así descritas. Tu autorretrato, el modelo de mujer que me enamoró y con la que vivo y disfruto intensamente todo lo que hacemos. Qué felicidad tan grande.
Qué comentario tan cierto mientras más preparada esa hora la mujer más difícil es encontrar una pareja
Muy buen análisis ,realmente cierto
En la época de nosotros, bueno más que todo de nuestros padres, la mujer que no se casaba se veía rara y vivía señalada como «la solterona», siempre se llegaba al tema de conversación de «como no se casó», como si ella fuera la más de malas. Ahora en éstas nuevas generaciones, ser soltera, divorciada o viuda es un privilegio, la opción de no querer tener hijos, es una decisión tomada desde la juventud y con buenos argumentos. Ellas quieren estudiar, trabajar en sus proyectos de vida, viajar, en fin muchas actividades que las realicen. A una mujer segura de si misma, es díficil que se le acerque un hombre, pues todavía el machismo está haciendo estragos en nuestra sociedad; conozco hombres hermosos, inteligentes, con maestría, doctorado y demás, casados con mujeres que no tienen aspiraciones, sino de tener hijos y estudiar para ser estilistas. Increíble pero cierto. Gracias tus palabras me aclararon muchos pensamientos que tenía que resolver. Un abrazo…
Hola Viky
Es que a las mujeres se le abrió un mundo, el cual no quieren dejar tan fácil como para arriesgar lo logrado, y de pronto por una vida que no las llenaría como quisieran.
La mujer un ser para nada débil. Demostrando su fortaleza en este artículo y a través de ti!👏👏👏
María la vida es una serie de etapas, ahora mi mejor compañía son los libros… Silenciosos, calidos, acogedores…