No sé si uno muriéndose las cosas cambien. Eso lo vi en un video que alguien decía que, se iba a tener que morir para que las cosas cambiaran y yo me puse a pensar, será así o será que nosotros tenemos que hacer que las cosas cambien o que el cambio cambie.
En fin, por ahí dicen que lo único que cambia constantemente es el cambio y si no, pregúntenles a los politiqueros, a esos que se van volteando como buñuelos y luego dicen que la política es dinámica. ¡Mamola¡, nada de dinámica, es traicionera y arrastra a todo el mundo, hasta las mejores familias sienten que tienen un judas adentro.
En el caso de la política, lo que cambia es la necesidad o a muchos los cambia el estómago, piensan con él, porque es más fácil un puestico en cualquier lado, que un cambio sincero de politiqueros engañosos y corruptos.
Pero bueno, eso por el lado política, pero de verdad que el cambio hay que hacerlo, no nos podemos quedar como somos toda la vida, a medida que vamos creciendo tenemos que ir haciendo el cambio, ya no mas minifalda a los 70 porque, aunque tengas buen cuerpo y piernas al voltearte, la cara te dice que tienes 70.
Igual con el modo de ser y de pensar.
Escucho a cada rato personas que dicen: “es que yo soy así y ustedes me conocen”, si, sabemos que es así, pero ¿no puedes cambiar? ¿Tenemos que aguantarte el resto de vida con tus imprudencias, pleitos, o problemas por todo?, no, creo, hay que madurar, hay que cambiar para poder soltar y vivir mejor.
¿Para qué seguir siendo el problema en una relación, llámese de esposos, de amigas, de compañeros de trabajo, de estudio y otras?, ¿por qué en lugar de decir “ustedes me quieren así”, no te dejas querer mas sin esos problemas que siempre pones?,
Son sugerencias, pero nada mas rico, mas sano, mas tranquilo, que sentirse liviano de esas pequeñeces que te amargan la vida a ti a y los demás. No hay nada mejor que crecer en años, libre de estorbos que antes no podíamos soltar, porque nos aferrábamos a creencias y maneras que nunca nos dejaron ser mejores personas, amigas, esposas, compañeras. Todo por llevarnos un punto, que al final para nada servía o sirvió.
Delicioso hacer el cambio en todo. Que tal salir jubilosas y no jubiladas, que tal, tener tiempo para no hacer nada en lugar de maltratarnos a diario con horarios impuestos por nosotras mismas, oficios que pueden cambiar de día, comidas que no son necesarias de hacer tan complicadas, lavar ropa todos los días, aplanchar la ropa, no creo que todavía haya quien haga ese oficio tan harto, cuando venden ropa que se lava y queda lista, cuando las comidas mas sencillas son las saludables y cuando el oficio casero se puede hacer una o dos veces por semana.
Ahora lo que debemos cambiar es el chip de que cambiar no es bueno y que nada mejor que, como se hacían las cosas antes, paja, ahora todo está hecho para que seamos felices, descomplicadas, livianas. A nuestra edad no tenemos por qué preocuparnos por nada ni por nadie. Es hora de cambiar para disfrutar del resto de vida que nos falta.
Mi invitación es a hacer el cambio a cualquier edad y mas cuando los años nos van llegando, eso nos libera, nos ayuda a ser felices y a reflejarla en los nuestros, nos permite dar ejemplo a quienes viven o comparten con nosotros, nos da la oportunidad de tener amigas por y para siempre porque sabemos serlo, nos ayuda a tener una vejez mas acompañadas, bien por la familia que te valora por como eres, o por tus amigos, compañeros y vecinos que ven ti un caramelo escaso.
Ánimo el cambio hay que hacerlo para que no nos cambien a la brava.
Gracias ,por la reflexión en la cual estoy de acuerdo totalmente ,el ser humano único de todas las especies vivas, que se resiste a cambiar y evolucionar de acuerdo a la edad , mi maestro Marco Antonio Polo Scott siempre en sus clases repetía ,ustedes “flojitos y cooperando” ; la resistencia genera hábitos no adecuados y crea dolor y resentimientos no saludables ,un abrazo afectuoso té envío María Victoria 💐🙏