Cada día, a las 5pm, tengo con mis nietos la Hora del cuento.

Como este encierro está largo y va para largo, decidí que cada día, mientras ellos quisieran, sin presiones y solo por gusto, tener un encuentro virtual, en donde yo como abuela, les contaría un cuento y hablaríamos acerca de él.

Mariadelmar, en estados Unidos y de ocho años, no lo dudó, Tomás de tres años, en Medellín, también aceptó a través de su mamá para estar en el programa, el tiempo que quisiera y con Sebastián, también de 3 años, decidimos, ente su mamá y yo, que él se acercara a la pantalla cuando quisiera y si quería escuchar o hablar lo hiciera, les recuerdo que es autista y su tiempo de concentración, dura poco, no solo por su edad, si no, porque el solo habla inglés (aunque entiende algo de español), y su abuela, no hace el cuento en ese idioma.

Y arrancamos La hora del cuento. Mariadelmar, siempre es la encargada de llamar, una vez termine sus deberes y después nos vamos conectando con los otros.

 

El programa fue cambiando, ya no era la abuela la que leía lo que consideraba interesante para ellos, sino que ellos, me fueron añadiendo pautas para buscar lo que querían. A uno le gustan los cuentos de dinosaurios, a la otra le gusta leer sobre animales, y el tercero solo se arrima al computador a saludar y a veces a opinar, cuando le gusta lo que ve.

Tomás aguanta 20 minutos, Sebastián, entra a raticos, pero con Mares, nos quedamos hasta una hora o más. A veces ella lee, o simplemente me dice que quiere conversar.

Ella pone el tema, tuvimos encuentros de llorar toda la hora porque se sentía incomprendida, pero por culpa de ella misma porque no obedecía, ni hacia as cosas correctamente.

Esas conversaciones son maravillosas, porque me permiten hablarle de la importancia de manejar una buena relación con sus padres, de cómo mejorar sus compromisos, de cómo cumplir lo que promete, de escribir lo que tiene que hacer, de hablarle del orden, del cuidado de sus pertenencias y de ella misma, de ayudarle a su mami en esta época, de cómo atender a su maestra en la horas de estudio, de qué jugar con su hermano para entretenerlo y así muchos temas que incluyen trabajar valores.

ESE ANIMALITO TAN FEO

Recientemente estuvimos hablando sobre el Coronavirus y le pregunté qué si sabía que era eso y muy horonda me fue diciendo:” pues claro Tita, es una enfermedad que está por todo el mundo, es fuerte, pero no tan fuerte como se cree, porque es como que a uno se lo pegan al caminar y eso empezó en china por un bendito murciélago”.

Seguí interrogándola: sabes cuantos días llevamos en cuarentena, “sí, como 40 o 60, yo creo que eso va rápido porque ya voy a terminar segundo grado”

Me dijo que no quería quedarse más en casa porque ella ere una “nerda” y hacia todo rápido, que si tuviera la oportunidad de ver a alguien escogería entre su tía Cami y su tío Juanda porque hacía años que no los veía, pero que jamás iría a Brasil, o a España porque “allá el virus está regado y están con fuego por el corona”

Cuando le pregunté que si sabía cómo había empezado el virus me dijo: “obvio, en china, es que allá comen murciélagos y los que comieron, se montaron en un barco y todos se contagiaron y llegaron a un hospital y allá se lo pegaron a otros y eso se regó. Todo por comerse un bendito murciélago, gas”

También me aseguró que ella sabía como quitar el coronavirus: “primero, que los chinos no coman murciélagos y yo voy a poner un restaurante y Voy a ir a la casa blanca con una caja de mi comida, pero en realidad es una poción, y le diré a Trump que se acabó el coronavirus y que pueden salir donde quieran”

El tema la hizo imaginar y soñar con ser una bruja buena que hace pócimas para aliviar al mundo y así poder volver a salir, porque, aunque la es bueno estar la casa a veces su mama, es como brava, seria y feliz

Le dije que me explicará y me dijo que: “brava, porque Sebastián y mas yo, no hacemos las cosas bien, dejamos todo regado, no ayudamos en nada. Seria, porque trabaja con la oficina y ella es muy buena en lo que hace, y feliz, cuando viene alguien a visitarnos con máscaras y de lejitos”

Sobre lo mejor de estar encerrados es la visita sorpresa que le hizo su maestra Miss Sánchez, que le llevó un regalo y una tarjeta que decía que ella era una sirena que trabajaba mucho y más. Me aseguró que era una muy buena maestra. Y lo mas malo, es que no puedo ver a mis amigos”

LA MAESTRA

Estos ratos con los nietos son maravillosos, Tomás nos cuenta sobre dinosaurios, nos dice todos los nombres, saca sus libros de dinos y nos hace el que lee el cuento.

Por su parte Sebastián, pasa y me mira y mi dice “Hi mr. Tita”, ¿are you ok?, yo le contesto y sale nuevamente a seguir jugando

No están conmigo físicamente, pero encontré la forma de verlos a diario, de conversar con ellos, de saber que hacen,

Aprendí mas ahora de ellos, que cuando los tenía a la mano. Aprendí de sus gustos, supe de sus comidas favoritas, cuentan que hacen en el día detalladamente y gozan viéndose ellos mismo.

Se los recomiendo. Tener los nietos lejos no es excusa para no verlos y sentirlos, para saber de ellos, para conoceros mejor y para amarlos más.

Y como dice Mariadelmar Bendito murciélago, me permitiste acercarme más a mis nietos, pero no te voy a comer gaasss